Viajar es mucho más que marcar las cosas de una lista. Está genial tomarse la foto con la Torre Eiffel y presumirle a tus amigos a través de las redes sociales, aún así hay algo mucho más profundo en estas experiencias.
Como la mayoría de las personas te sientes emocionado al oír de viajes, pero, ¿te has puesto a pensar cuál es tu razón de querer viajar?
Es lo primero que debes tener claro. Debes ser honesto contigo mismo, porque una vez que descubras el “por qué”, vas a estar mucho más motivado a planear tus primeras aventuras. Así que hazte las siguientes preguntas:
¿Qué quieres experimentar y aprender?
¿Qué actividades te hacen feliz?
De esta forma podrás escoger con mayor facilidad tu próximo lugar de destino y vas a aprovechar más tu estadía. Además, si tu razón es suficientemente fuerte, te estarás comprometiendo de forma más concreta a hacer tus sueños realidad.
Viajar nos permite crear nuestras propias historias y tener una invaluable lista de memorables experiencias. Mucho mejor que sólo acumular posesiones.